jueves, 17 de diciembre de 2020

Prevenir, reutilizar y reciclar en Navidad: reto para la ciudadanía

Unas navidades distintas. Efectivamente, la pandemia COVID-19 hace que nuestros hábitos cambien, sobre todo, los sociales. Pero también es verdad que la población en general quiere hacer lo mismo que hace siempre, constituyendose en un evidente dilema entre relaciones familiares y amistades o un círculo más pequeño como nos indican las autoridades sanitarias. Desde ese punto de vista depende de cada uno cumplir con las restricciones de tipo sanitario, pero ¿qué pasa con los residuos?.

Hasta el año pasado, la ciudadanía española generaba en navidad 0,73 kg/hab más de residuos, es decir, que desde el 23 de diciembre hasta el 6 de enero (15 días) la generación equivalente de residuos era aproximadamente de 492.750 toneladas, lo que supondría si se manteniese ese ritmo de consumo durante todo un año, generar 11,8  millones de toneladas de residuos más a lo que se viene generando en la actualidad, lo que nos da idea de la envergadura del problema, máxime si trasladamos los porcentajes de gestión de los residuos que tiene nuestro país a este valor.

Este año es excepcional. Menos reuniones sociales, menos familias y allegados en las fiestas, menos movilidad, etc., va a hacer que el consumo genérico sea menor. Pero este menor consumo no va a repercutirse por igual en la generación de residuos. Mintras que el canal comercial y HORECA va a caer en buena medida afectando sobre todo a restos orgánicos y envases de vidrio, por ejemplo, se verá incrementado todo lo referente a envases y embalajes de cartón derivado del e-comercio y de las grandes superficies. 

Pero lo cierto es que el frenazo de la economía se va a notar en la generación de residuos. Si como señala la OCU, el gasto de las familias en estas navidades se reducirá un 20% respecto al del año 2019, y el de las empresas un 40% (menor inversión, cierres de PYMES, ERTES, etc) estableciendo una relación directa entre consumo y generación, podemos estabelcer que cada habitante generará en navidad de media 1,4 kg/día frente a los 1,2 kg habituales, o lo que es lo mismo un 14% más en 15 días frente al 17% de año pasado.

Tres puntos porcentuales, sobre todo en resto y materia orgánica. Algo es algo aunque no suficiente.  El principio de prevención es esencial. Compar lo justo y no más, e intentar cambiar los hábitos consumistas que la publicidad en los medios de comunicación nos tienen acostumbrados en estas fechas y sobre todo referido a los que ya tenemos una edad y hemos sido educados en la cultura del usar y tirar, empezar por cambiar hacia una economía doméstica más circular, que no es más que recuperar ciertos valores de nuestros abuelos y bisabuelos en nuestras latitudes.

Los consumidores tenemos un problema ante esta situación. Las estrategias posibles de prevención de residuos pasan por:

- Reducción de la generación de residuos. Para ello la ciudadanía sólo puede contribuir ajustando su consumo y cambiando su modo de actuar comprando servicios y no productos. Las empresas, en cambio, pueden actuar desmaterializando sus productos.

- Reutilización y alargamiento de la vida útil de los productos. Esto se va reajustando de manera natural a través de plataformas de intercambio y plataformas de mercados secundarios, que favorecen la reutilización en el ámbio doméstico. Sin emabrgo, queda aun mucho camino a nivel empresarial para llegar a ello, pues ha de cambiar la fillsofía de diseño y fabricación a nivel de las grandes multinacionales y fabricantes, sobre todo en producots tecnológicos y bienes de linea blanca.

- Reducción del contenido de sustancias nocivas en materiales y productos. Esta cuestión se refiere a procesos productivos dependientes, por tanto, de las empresas, donde la ciudadanía sólo puede actuar a través de una información contenida en el etiquetado de los productos u optar por marcas o productos certificados en la UE. Si se tuviese en cuenta este aspecto, se podrían reducir la generación de residuos potencialmente tóxicos o peligrosos.

- Reducción de los impactos sobre la salud humana y ambiente en general, generado por los residuos. Precisamente la disminución de los residuos generados a través del ecodiseño y cambios de comportamiento del consumidor, son aspectos que avalan la disminución del impacto sobre la salud humana, en todo el eje de la operativa de los residuos, desde la generación por todos los canales, hasta su reciclaje, conversión energética y finalmente su disposición en vertedero, que debería ser mínimo.

 De nosotros depende, por tanto, que estas navidades, además de distintas por la COVID-19, sea más sostenible ambientalmente y aprovechar para iniciar el cambio necesario para hacer ua economía más circular.

José Vicente López