Mostrando entradas con la etiqueta eficiencia. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta eficiencia. Mostrar todas las entradas

miércoles, 6 de marzo de 2013

¡UTÓPICA EFICIENCIA SUECA!


Este país escandinavo nos sorprende con su enorme eficiencia en la gestión de sus residuos y las políticas que lleva a cabo. Ya desde los años 70 se implantaron numerosas medidas a este respecto, empezando desde la creación de cubos especiales para la separación de residuos, hasta la construcción de fábricas e incineradoras para la producción de energía cuyo combustible fueran los residuos.

Y es que se ha ganado la fama por su 96% de residuos que son completamente reciclados o incinerados, solo el porcentaje restante acaba en vertederos. La energía que se obtiene de esta incineración, permite abastecer de electricidad a 250.000 familias (de 4,6 millones que hay en total) y a 810.000 hogares de calefacción urbana (un 20% de país).

Además, los procesos de revalorización energética de los residuos, han conseguido reducir la emisión de gases de efecto invernadero de manera significativa, así como la de contaminantes resultantes, sobretodo metales pesados, en un 90%.

Las implicaciones medioambientales de este país no terminan. La conciencia ciudadana está muy arraigada, en los hogares se separa de manera normal orgánicos, metales, pilas, vidrios de color, vidrios transparentes, plástico duro, plástico blando, cartón y Tetra Pak, papeles, periódicos y revistas. Y es que esta eficiencia no es gratis, los ciudadanos no conocen la pereza si de reciclar se trata y el acto se separar los residuos es una costumbre automática. Así podemos mencionar la localidad de Borås, donde el aprovechamiento de los residuos asciende al 99%, y sus 64.000 habitantes pagan un 50% menos en la factura de luz y un 20% en el billete de transporte público.

El gobierno presentó en 2011 una estrategia de tecnología medioambiental que se basa en tres puntos: promover la exportación de tecnología sueca para el propio desarrollo económico y el global, promover las empresas suecas de tecnología “verde”, pioneras de investigación e innovación medioambiental, y facilitar la comercialización de estas innovaciones. Para ello el gobierno ha destinado 400 millones SEK que son 45 millones de euros.

Y también podemos mencionar las ciudades del futuro, como es el “Stockholm Royal Seaport” que terminara de ser construido en 2025 y cuyas instalaciones estarán completamente libres de combustibles fósiles y tendrán repercusiones favorables para la conservación de la naturaleza. Así también es el Aeropuerto de Arlanda, los complejos de viviendas Malmö, o las casas con calefacción humana en periodo de investigación.

 Esto, que nos parece utópico, acarrea un paradójico problema para Suecia, y es que la capacidad de las incineradoras es superior al material que reciben, es decir, no hay suficientes residuos para responder a las necesidades energéticas del país. Este problema lo ha solucionado mediante la importación de 800.000 toneladas anuales de residuos desde Noruega, a quien le sale mejor pagar por la exportación de éstos, que por su gestión dentro del país o por la implantación de políticas adecuadas. Y cuidado que Italia, Rumanía y Bulgaria están en la lista de interesados.

Esto que es el colmo de la eficiencia, “no solo me ocupo de mis residuos sino de los del vecino”, es un negocio redondo para Suecia, recibe materia prima para la producción de energía y dinero de Noruega por su exportación, además Suecia vuelve a vender los metales pesados resultantes de la incineración del país proveniente.

Estas prácticas de ecología industrial no solo se practican en este país, Holanda, Alemania y Dinamarca también importan residuos desde Italia, Reino Unido, Irlanda y Francia, ya que estos últimos no disponen de infraestructuras suficientes para su tratamiento. Y en la isla de Mallorca, pasa algo parecido, ya que hace años prepararon unas instalaciones para la incineración de residuos pensando en la afluencia turística que tendría la isla y que por la crisis no cumplió con los requerimientos de residuos.

A pesar de que los principios medioambientales nos llevan a la producción de “residuo cero” y a la reducción de nuestra generación de basura, probablemente en los próximos años se extiendan las exportaciones de residuos como si fueran otra materia prima más, permitiendo el desarrollo de toda una industria de tecnología para la gestión de residuos.



Beatriz Nofuentes Martínez y Flor González Baena.
Estudiantes del Grado en Ingeniería del Medio Natural (UPM)

viernes, 28 de septiembre de 2012

¿Cuál es la eficiencia de los neumáticos recauchutados?

La Cátedra para la Investigación y Formación sobre Neumáticos Reciclados de la Universidad Miguel Hernández (UMH) de Elche ha llevado a cabo un estudio en profundidad de la eficiencia medioambiental de los neumáticos recauchutados producidos en nuestro país. El estudio ha demostrado que a través de la producción y uso de neumáticos recauchutados pueden alcanzarse ahorros de entre un 50 y un 75% en el consumo de energía y materias primas, así como en las emisiones de CO2 a la atmósfera. Estas reducciones tienen, también, una repercusión directa en la economía de los usuarios.

A la presentación de esta investigación han acudido el vicerrector de Investigación e Innovación de la UMH, Fernando Borrás Rocher, el director de la Cátedra para la Investigación y Formación sobre Neumáticos Reciclados, Miguel Sánchez Lozano, la investigadora en el Departamento de Ingeniería Mecánica y Energía de la UMH Marta Guzmán García y el presidente de la Asociación Española de Neumáticos Reciclados, Salvador Pérez Vázquez.

En la fabricación de neumáticos recauchutados para turismo se emplea por término medio un 44,5 % menos de energía que en la fabricación de los neumáticos nuevos de similares características, lo que equivale a un ahorro medio de 10,5 L de petróleo por neumático. En cuanto a neumáticos recauchutados para camión y vehículo industrial, el ahorro energético obtenido es del 69,6%, que equivale a un ahorro medio de 98,3 L de petróleo por neumático.

Por otro lado, la producción de neumáticos de turismo recauchutados tiene asociado un 51,7 % menos de emisiones que la de los neumáticos nuevos equivalentes, que se traduce en una reducción media de 32,8 kg de CO2 emitido a la atmósfera por neumático. Para recauchutados de camión y vehículo industrial, la reducción media es del 69,1%, lo que en términos absolutos supone evitar la emisión a la atmósfera de 234,3 kg de CO2 por neumático.

La investigación también cuenta con un análisis de los costes de fabricación que considera los asociados a materiales y a los recursos energéticos empleados. El ahorro de energía y materias primas asociado al recauchutado se traduce lógicamente en un ahorro económico, que repercute finalmente en el consumidor final. Este ahorro de costes respecto a la fabricación de neumáticos nuevos se ha estimado en una media de un 47% para los neumáticos de turismo y de un 76% para los de camión y vehículo industrial.

En su fabricación se respetan los más rigurosos controles de calidad y las empresas del sector muestran además una preocupación creciente por adoptar sistemas productivos más eficaces y respetuosos con el medio ambiente. Como resultado, los neumáticos reciclados presentan, además, similares características de confort y cumplen las mismas normas de seguridad que los nuevos. El neumático reciclado constituye, por tanto, una alternativa medioambiental y económicamente sostenible que debe ser promocionada.

El trabajo se ha realizado gracias a la colaboración de empresas representativas del sector de neumáticos reciclados en España que han participado en el análisis de sus procesos y en la aportación de datos. En cada una de las empresas se ha contabilizado la energía consumida en el proceso completo de producción (incluyendo los consumos directos e indirectos y los asociados a la recuperación de las carcasas de neumáticos usados), así como las materias primas utilizadas en el mismo y la energía necesaria para producir dichas materias primas. Por otra parte, se han estimado las emisiones de CO2 producidas durante la fabricación de neumáticos en cada empresa, a las que se han sumado también las emisiones de CO2 que se estiman asociadas a la producción de las materias primas.

Una vez obtenidos los resultados para cada una de las empresas colaboradoras, se han calculado los valores medios ponderados de estos consumos y emisiones para cada tipo de neumático, que se consideran aplicables a la producción de neumáticos reciclados en España. Estos valores se han comparado con los correspondientes a la fabricación de neumáticos nuevos, tanto para turismo como para camión y vehículo industrial.

Fuente: Gestores de Residuos