Este 6 de agosto fue publicado en la revista PNAS
(Proceedings of the National Academy of Sciences of the Unitaed States of America)
el artículo “Trajectories of the Earth
System in the Anthropocene”, en él se alerta de la posibilidad de que la tierra
entre en un estado invernadero irreversible que haga inhabitables muchos
lugares del planeta.
El estudio ha sido liderado por Will Steffen, de la
Universidad Nacional Australiana (ANU). Este destaca que las principales
consecuencias serían el aumento de la temperatura media del planeta y una
subida a largo plazo del nivel del mar de unos 10 a 60 metros.
En cuanto a la temperatura media, la investigación
estima que podría llegar a subir hasta 5 grados respecto a la época preindustrial.
Actualmente se encuentra 1 grado por encima y se estima que sube a un ritmo de
0,17 grados por década. Esto podría cambiar ya que en el estudio se da la posibilidad
de que una vez superados los 2 grados (por encima de la temperatura media de la
época preindustrial) se desencadenarían unos procesos llamados
retroalimentaciones que harían aumentar aún más la temperatura media de la
tierra independientemente de si se subsana a tiempo la emisión de gases de
efecto invernadero.
Estos procesos llamados retroalimentaciones son la descongelación
del permafrost, la pérdida de metano hidratado de las aguas marinas, el
debilitamiento de sumideros de carbono en tierra y mar, y el aumento de la
respiración bacteriana en los océanos.
También incluyen la muerte regresiva de la selva
amazónica y del bosque boreal, la reducción de la capa de nieve en el
hemisferio norte, la pérdida de hielo marino en el verano ártico, así como la
reducción del hielo marino antártico y las capas de hielo polar.
Todo esto pone de manifiesto que los esfuerzos actuales
no son suficientes para cumplir el acuerdo de París, acuerdo al que se
suscribieron en 2015 unos 200 países y que busca mantener el aumento medio de
la temperatura mundial por debajo de los
2 grados respecto a la era preindustrial.