En ocasiones no nos damos cuenta de la importancia que
pueden tener nuestros gestos. El tirar, por ejemplo, una bolsa de plástico al
suelo supone que esté “dando vueltas”
muchos años, ocasionando un daño irreparable para el medio ambiente.
Aquí os mostramos un listado de lo que tardan en
biodegradarse algunos de los materiales más cotidianos que usamos si nos lo
reciclamos correctamente.
Una bolsa de plástico. De media tardan unos 150 años en
biodegradarse. Sin embargo, la mayoría de las bolsas de plástico están hechas
con polietileno de alta densidad y algunos expertos insisten en que pueden
llegar a tardar hasta mil años en descomponerse por completo.
Una colilla. Los cigarrillos contienen más de 600
componentes, de los cuales el acetato de celulosa es el que aguanta más en el
tiempo sin desintegrarse. Este plástico se encuentra en el 95% de los filtros
de los cigarrillos convencionales y tarda hasta cinco años en descomponerse.
Chicles. ¿A quién no se le ha pegado alguna vez un chicle
caminando por la calle? Pues ese chicle puede tardar cinco años en desaparecer.
Piénsalo antes de tirarlo al suelo.
Latas. Una lata de refresco puede tardar alrededor de 200
años en descomponerse por completo.
Una bolsa de patatas. Permanece entre 75 y 80 años. El
material metalizado del interior de las bolsas, usado para su conservación, es el
responsable de que el envase aguante tantos años intacto.
Botellas de plástico. Si tiras al suelo una botella de
plástico hecha con tereftalato de polietileno (PET), estarás dejando en
libertad un artículo que es casi imposible desaparezca en menos de 500 años.
Cartón. Dependiendo del grosor del cartón puede tardar entre
dos y tres meses en biodegradarse.
Pilas: tardan más de 1.000 años en desaparecer. Además, son
altamente contaminantes para el medio ambiente debido a su contenido químico
hecho de materiales pesados como el mercurio.
Las botellas o restos de vidrio: 4.000 años. Para
los componentes naturales del suelo es una tarea ardua transformarlo. Además el
vidrio es reciclable 100% y con un simple gesto podemos darle una nueva vida.
Estos datos alarman y
si lo desconocías toma nota y #reduce, #reutiliza y #recicla. Cuidemos el
planeta por nosotros y por lo que vendrán.
Fuente: Ciencia Explora y Naturarla